6.11.06

Berrotarán: polemizan por el presunto riesgo de los arcos para parar camiones
Vecinos dicen que pueden matar a un camionero. El intendente lo niega.
Una pesada viga de ferrocarril instalada en un arco de acceso a Berrotarán que tiene por fin impedir el acceso de camiones a la zona urbana generó una polémica por las denuncias de un grupo de vecinos que consideran que esa estructura representa un riesgo para la vida de los camioneros. En tanto, desde el municipio defienden la medida y ratifican que la viga seguirá donde está. Se trata de un arco ubicado en el acceso oeste a la localidad, sobre la ruta provincial E 60 que une Berrotarán con la zona minera y turística que comienza en Las Caleras de Calamuchita. Allí, hace unos años, la Municipalidad dispuso una estructura de cemento con chapones móviles para impedir el ingreso de camiones al pueblo, un problema de años. Pero al no ser una estructura fija, algunos camioneros no respetaban la reglamentación y más de una vez las chapas son arrancadas por la altura de los camiones y quedan tiradas sobre la ruta. El cartel colocado sobre la estructura indica como altura máxima permitida 2,50 metros. En nombre de los denunciantes, Ariel Ruffino indicó que están de acuerdo con que se controle el ingreso de camiones a la localidad, pero objetan la forma mediante el uso de rieles de ferrocarril "a una altura que puede generar riesgos porque para un camión grande está al nivel de la cabeza o el pecho del chofer". Ruffino consideró que "es una falta de sentido común y de respeto hacia el ser humano" e indicó que insistirán "por todos los medios para ser escuchados, pero si no lo somos, tomaremos alguna medida para llamar la atención antes de que haya que lamentar víctimas fatales". Inclusive algunas voces de vecinos disienten con las autoridades municipales acerca de las señalizaciones previas a ese arco, sosteniendo que no son suficientes para alertar sobre la infraestructura ahora cambiada y el riesgo que implica si pretendiera ser sobrepasada como era habitual antes. La posición municipal. Por su parte, el intendente Ángel Storello afirmó a este diario que el riel quedará donde está colocado, consideró que no atenta contra la integridad física de las personas. "Hay medidas que cuando molestan a alguien traen problemas, pero nosotros actuamos pensando en la mayoría", dijo. El intendente explicó que cuando se construyó el arco con los chapones móviles también se colocó la correspondiente señalización con carteles y semáforos para alertar a los conductores de camiones y colectivos. "Si se respetaran los indicadores, no habría problemas, pero la gente no respeta las normas y los chapones vivían rotos, tirados en la ruta, siendo un peligro para los demás vehículos "Cuando hicimos el arco podríamos haberlo hecho fijo, como hicieron en muchos lugares, por ejemplo en Gigena. Pero esta denuncia surge porque molesta a algunos y nosotros tenemos que favorecer a la mayoría", enfatizó Storello. El jefe comunal desacreditó el reclamo sobre la eventual peligrosidad del riel de ferrocarril: "En absoluto es peligro para la vida de nadie. La cabina de un camión alto apenas toca la parte de arriba, no puede provocarle la muerte a alguien", aseguró .
Diario “La Voz del Interior”, 28 de Octubre de 2006.